¿Por qué pasarte de autónomo a Sociedad Limitada? 4 claves
¿Has pensado en pasarte de autónomo a Sociedad Limitada?
¿Has pensado en pasarte de autónomo a Sociedad Limitada? ¿Sabes cuando debes hacerlo y cuando no debes hacerlo? ¿Conoces las ventajas y desventajas de la S.L. con respecto al autónomo?
Si buscas la respuesta a alguna de estas preguntas, estás en el lugar indicado. Hoy te explicaremos alguno de los puntos más importantes, cuándo es el mejor momento para hacerlo y por qué, llegado el momento, es mejor constituir una S.L y abandonar la figura de autónomo.
¿Sabes qué es exactamente una Sociedad Limitada?
Una Sociedad Limitada (S.L.) o Sociedad Ilimitada de Responsabilidad (S.R.L.) es un tipo de sociedad de carácter mercantil en el que la responsabilidad frente a terceros está limitada al capital que el socio ha aportado.
Como en otros modelos societarios, el capital de la empresa está integrado por las aportaciones de todos los socios, que a su vez se divide en participaciones sociales, indivisibles y acumulables.
Un aspecto importante es que sólo podrán ser objeto de aportación social los bienes o derechos patrimoniales susceptibles de poder ser valorados económicamente. Es decir, las aportaciones de los socios deben tener un valor económico, por lo que en ningún caso pueden ser trabajos o servicios.
La Administración exige que la transmisión de las participaciones sociales se formalice en un documento público.
¿Por qué pasarte de autónomo a Sociedad Limitada?
Ahora que ya te hemos contado que es una S.L, vamos con la pregunta clave, ¿por qué pasarte de autónomo a Sociedad Limitada?
1. Reducción de carga fiscal
La retención de IRPF en los autónomos es progresiva en función de los ingresos mientras que las Sociedades tributan a un tipo fijo menor. El tipo general de este impuesto se mantiene en un 25% sobre la base imponible y, para las sociedades de nueva creación, se aplica un tipo reducido del 15% durante el primer periodo impositivo.
2. Limitar la responsabilidad al capital social aportado y no al patrimonio.
3. Financiación.
Como empresa existen más facilidades para obtener financiación que para un autónomo.
4. Proyección futura a nuevos mercados y empresas.
El estar constituido como Sociedad te da más posibilidad de ofrecer un servicio más integral y llegar a grandes empresas.
5. Imagen más profesional.
Contar con una sociedad reforzará la imagen de marca y lo que perciben los clientes potenciales de la empresa.
¿Cuándo es el momento perfecto para constituir una Sociedad Limitada?
1. Tus ingresos anuales superal los 40.000.
2. Quieres proteger tu patrimonio personal ante proveedores.
3. Buscas trabajar con grandes empresas o quieres conseguir facilidades de crédito bancario.
4. Trabajas habitualmente con otra y otras personas y queréis formar una sociedad juntos.
¿Estás en alguna de estas situaciones? ¿Tienes dudas sobre si deberías pasarte de autónomo a sociedad Limitada? En Patricia Perdomo consultores podemos ayudarte. Contacta con nuestros expertos.
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